viernes, 10 de septiembre de 2010

PREDATORS (2010)

image

La película que hoy nos ocupa, Predators (de Nimrod Amtal), es una nueva muestra de la crisis de ideas que asola Hollywood en nuestros días.

Una vez más, se ha ido a lo fácil, a lo que ya funciona, para hacer un nuevo remake, o secuela, o como quieran llamarlo. En 1987 John McTiernan nos presentaba a un grupo de fortachones mercenarios en una selva frente a una criatura venida de otro planeta con aptitudes innatas para la caza. En 2010 Amtal nos coloca un grupo de profesionales del homicidio en una selva frente a no una, sino tres criaturas como las del primer film.

Con estos dos planteamiento prácticamente idénticos son obligadas las comparaciones. Si en 1987, el héroe era un Arnold Schwarzenegger en pleno apogeo, en 2010, tenemos a Manolete, es decir Adrien Brody, que por mucho gimnasio que se haya chupado, no da el pego del personaje. Añadir que físicamente y en medio de una selva, Brody tiene cierto parecido a Bear Grylls (El último superviviente).

Volviendo al planteamiento y a las comparaciones, las similitudes son numerosas entre los dos films, a saber, una chica, una ametralladora de esas que giran al disparar, una escena de un personaje mirando fijamente entre los árboles casi como intuyendo la presencia del Predator, y mi favorita, una casi-copiada de la escena del indio (los que sean fans de la peli del 87 saben a qué me refiero).

Dejando a un lado las comparaciones y centrándonos en la película, mostremos el argumento: un grupo de Predator ricos que se aburren de jugar al golf, contratan en una agencia de viajes alien, un safari de caza donde el hombre es la presa. ¡Toma ya!.

En el grupo elegido va a parar un soldadito (Brody) que es un crack, lo sabe todo a la primera, tiene una capacidad de síntesis extraordinaria. Para ser justos decir que a estas alturas de la saga todos sabemos como son los dichosos marcianitos y no tiene sentido alargar el suspense de cuánto tardan los personajes en saber a qué se enfrentan.

Pues bien, las presas van cayendo poco a poco, por supuesto. Pero hay algo a reseñar, los Predator se han vuelto perezosos. Si en 1987 uno sólo se merendaba a prácticamente todo el reparto, aqui hacen falta tres, y como supondréis sólo va a quedar uno para enfrentarse a Brody, por supuesto.

En conclusión, película de cadena de montaje, sin alardes, que gustará a los fans del género y punto. Ni pretende sorprender, ni mostrar nada nuevo. Es exáctamente lo que parece.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tu comentario se publicará tras inspección por los administradores.
Tu comentario es libre pero debe guardar relacion con el tema tratado.
Tu comentario puede ser anónimo, pero preferimos que le eches cojones.

 

Copyright 2007 ID Media Inc, All Right Reserved. Crafted by Nurudin Jauhari